Imagínate una playa sin arena. Imposible, ¿verdad? Pero la arena no solo afecta al paisaje que disfrutamos. ¿Sabías que es el segundo recurso más utilizado después del agua, pero solo está regulado en algunas partes del mundo? Este hecho está causando verdaderos problemas en el medio ambiente.
ALGUNOS DATOS SOBRE LA ARENA
Cada año se extraen 59 millones de toneladas de materiales en todo el mundo, y hasta un 85% es arena para la construcción. Por detrás del agua y por delante de los combustibles fósiles, la arena es el segundo recurso natural más demandado y existe un mercado negro internacional que comercia con ella a precio de oro.
Además, algunos informes sugieren que su demanda global está aumentando a medida que la población mundial crece y se construyen más infraestructuras. Según un informe de la ONU de 2019, se estima que la demanda mundial de arena y grava alcanzará los 82 mil millones de toneladas en 2060.
Es importante destacar que su uso puede variar según las regiones geográficas y las actividades económicas predominantes. Por ejemplo, la construcción de edificios y la fabricación de vidrio son grandes consumidores de arena en algunas partes del mundo, mientras que en otras regiones la industria petrolera o la producción de arena para fines recreativos pueden ser los principales usuarios.
En 2019, la ONU publicó un informe titulado: «Extracción de arena: impactos económicos, ambientales y sociales en la gestión de los recursos naturales», destacando:
- La demanda de este recurso natural está aumentando a nivel mundial y la extracción no regulada puede tener efectos negativos en los ecosistemas costeros y los cuerpos de agua, así como en las comunidades locales que dependen de estos recursos.
- Existe relación entre la extracción de arena y el cambio climático, así como sobre el papel que juega la arena en la construcción de infraestructuras sostenibles y resilientes.
En resumen, este informa explica la necesidad de una mejor gestión y regulación de la extracción de arena.
¿Y DE DÓNDE SALE?
Se encuentra en grandes cantidades en la naturaleza y se extrae de ríos, lagos, océanos y dunas. Su calidad y la cantidad disponible varían según la ubicación geográfica y la composición geológica.
Esta se forma a partir de la erosión de rocas y minerales, lo que puede llevar mucho tiempo en ocurrir de forma natural. Y es que la regeneración natural de la arena depende de varios factores:
El clima afecta a la tasa de erosión y sedimentación. En general, las áreas con clima más húmedo tienden a tener una mayor tasa de sedimentación, lo que puede ayudar a regenerar la arena más rápidamente.
La topografía de una zona también afecta la tasa de erosión y sedimentación. Por ejemplo, las áreas con laderas más pronunciadas tienden a tener una mayor tasa de erosión, lo que puede disminuir la cantidad de este recurso disponible en un área determinada.
Los procesos naturales de erosión y sedimentación también afectan a la cantidad de arena disponible en un área determinada. Los ríos y las corrientes pueden transportarla desde una zona a otra, lo que puede ayudar a regenerarla en una zona en particular.
Si añadimos a esto, la extracción masiva sin respetar sus tiempos naturales, tenemos como consecuencia una disminución de la arena disponible, que tiene efectos negativos en los ecosistemas acuáticos y terrestres.
LA ARENA Y EL MERCADO NEGRO
Existe un mercado negro de arena en algunas partes del mundo. La extracción y el comercio ilegal de este recurso pueden tener lugar en áreas donde la demanda es alta y los controles son laxos, lo que lleva a la explotación excesiva y la degradación ambiental.
En algunos países, como India y otros del sudeste asiático, se han reportado casos de extracción ilegal de este material de ríos y playas. La arena extraída ilegalmente a menudo se vende a precios más bajos que en el mercado legal y se utiliza en la construcción y otros fines industriales.
Además, se ha informado que algunos países importan arena ilegalmente de otros lugares, lo que puede tener consecuencias ambientales graves para las regiones de donde se extrae. Acrecienta el problema de comercio ilegal de este recurso natural, que también puede estar relacionado con la trata de personas y la explotación laboral.
Si te estás preguntando cómo lograr que desaparezca esta problemática, por el momento, solo se conoce una manera: mediante la implementación de prácticas de extracción responsable y la adopción de tecnologías alternativas para reducir la necesidad de arena en ciertas industrias.