Como ya sabéis es muy importante seguir una buena alimentación para estar sano. Con el paso del tiempo nuestro organismo no funciona tan bien o necesita de una pequeña ayuda para que pueda seguir funcionando como lo hacía antes. Una de las cosas que más preocupa a la gente es poder frenar los cambios que producen el paso de los años a nuestra piel y órganos. Para ello invierten una gran cantidad de tiempo y dinero en cremas y tratamientos sin saber que lo más importante que deben hacer es seguir una buena dieta antioxidante.
Los radicales libres son los principales causantes de nuestro envejecimiento, porque dañan las moléculas de las células haciendo que se deterioren. Teniendo esto en cuenta, deberemos eliminarlos de nuestra dieta e introducir alimentos antioxidantes.
Se consideran antioxidantes porque una de sus principales funciones es la de estabilizar dichos radicales, inhibir sus efectos y proteger los órganos. Así evitaremos que nuestras células envejezcan.
Todos hemos oído hablar de la dieta antioxidante o de los alimentos que frenan el envejecimiento, pero puede que no conozcamos todos los alimentos que cumplen estos requisitos. Para que los podáis incluir a vuestra dieta y comáis de forma más variada, hemos preparado esta guía que os ayudará a tenerlo todo claro.
Alimentos de una dieta antioxidante:
Las naranjas: son el primer alimento en el que pensamos cuando buscamos alimentos antioxidantes, es cierto que tiene este poder gracias a la Vitamina C y a los betacarotenos, pero no es la fruta que más tiene.
Los tomates: son ricos en Vitaminas C y E, también tienen mucho licopeno, lo que lo convierte en un superalimento antioxidante.
Las espinacas: se dice que dan fuerza, pero son un potente antioxidante porque tienen grandes cantidades de provitamina A y Vitaminas C y E. Debes saber que todas las verduras de hojas verdes son buenos antioxidantes, pero esta destaca del resto.
El salmón: aunque no lo parezca, el salmón también nos ayudará a frenar el paso del tiempo para nuestra piel. Esto se debe a que tiene astaxantina, un antioxidante muy potente que ayuda a cuidar la piel, la vista y las células.
Los huevos: además de su alto contenido en proteínas, también mejoran el aspecto de nuestra piel y cuidan los órganos. Esto se debe a que en las yemas hay aminoácidos, triptófano y tirosinas, los cuales frenan los signos del envejecimiento.
El brócoli: es sin lugar a duda una de las verduras que más nos ayudará en este sentido. Tiene muchos compuestos azufrados (de los cuales nosotros destacamos el sulforafano, la vitamina C, los glucosinolatos, los isotiocianatos y los índoles). Como veis, es un alimento muy completo que lo podemos preparar de muchas formas diferentes, pero que es mejor cocinarlo lo mínimo posible para no perder sus propiedades.
Las sardinas: este es un alimento muy popular en la dieta mediterránea y es porque además de tener un buen sabor, aportan muchos beneficios al organismo. Ayudan a luchar contra el envejecimiento de las células, tienen Vitamina E y zinc. También se pueden cocinar de varias formas distintas, eso sí, hay que quitar las espinas.
Las nueces: de entre todos los frutos secos, este es el que más poder antioxidante tiene. Se calcula que tienen entre dos y 15 veces más cantidad de vitamina E que otros frutos secos. Por lo tanto, su efecto será mayor. Son muy fáciles de incluir en nuestra dieta antioxidante porque las podemos mezclar a cualquier plato. Es mejor que estén crudas, y no tostadas.
Además de incluir estos alimentos en nuestra dieta, también deberemos beber mucha agua, se recomienda 2 litros al día. Así tendremos el organismo limpio de impurezas, la piel tendrá un aspecto más joven. También se recomienda hacer deporte varias veces a la semana para mantener sanos los músculos y oxigenar la sangre.