En el escenario de la vida, la salud humana y el medioambiente están estrechamente relacionados, influyéndose mutuamente. Cada respiración que tomamos, cada sorbo de agua que bebemos, nos conecta con el mundo que nos rodea. Sin embargo, rara vez reflexionamos sobre la magnitud de esta conexión y cómo nuestras acciones cotidianas impactan tanto en nuestra salud personal como en el bienestar del planeta. El ser humano depende del mundo natural que le rodea y, aunque no lo creamos, no tanto a la inversa.
Un medioambiente saludable es vital para “garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades”, según indica la Organización Mundial de la Salud.
¿QUÉ ES LA SALUD PÚBLICA AMBIENTAL?
La salud pública ambiental, que se refiere a la intersección entre el medioambiente y la salud pública, aborda los factores ambientales que influyen en la salud humana, y que incluyen factores físicos, químicos y biológicos, y todos los comportamientos relacionados con estos. Conjuntamente, estas condiciones se denominan determinantes ambientales de la salud.
Las amenazas para cualquiera de estos determinantes pueden tener efectos adversos en la salud humana y el bienestar de toda la población. Abordar los determinantes ambientales de la salud mejora directamente la salud de las poblaciones. Indirectamente, también mejora la productividad y aumenta el disfrute del consumo de bienes y servicios no relacionados con la salud.
LOS FACTORES AMBIENTALES Y SUS IMPACTOS EN LA SALUD HUMANA
La contaminación del aire, el agua y el suelo, así como la exposición a productos químicos tóxicos, representan amenazas significativas para nuestra salud. La Organización Mundial de la Salud estima que un porcentaje considerable de la carga mundial de morbilidad y mortalidad se atribuye a factores ambientales, lo que confirma la relación directa que existe entre la salud humana y el medioambiente. Subraya la urgencia de abordar estos desafíos de manera integral.
LOS EFECTOS ADVERSOS EN LA SALUD HUMANA
Hoy en día existen un cierto número de efectos sobre la salud que se suponen provocados por factores medioambientales. Algunos ejemplos:
- Las enfermedades respiratorias, el asma y las alergias, por la contaminación del aire, en ambientes cerrados o al aire libre.
- Trastornos neurológicos de desarrollo, por los metales pesados, los POP (Persistant Organic Polutants, contaminantes orgánicos persistentes) como, por ejemplo, las dioxinas, los PCB y los plaguicidas.
- El cáncer infantil, por una serie de agentes físicos, químicos y biológicos (p. ej., humo de tabaco en el núcleo familiar, exposición profesional de los progenitores a disolventes).
- La exposición al humo del tabaco durante el embarazo aumenta el riesgo de síndrome de muerte súbita entre los bebés, de déficit de peso al nacimiento, de un funcionamiento reducido de los pulmones, de asma, de insuficiencias respiratorias y de infecciones del oído medio.
- Los plaguicidas tienen probablemente un efecto sobre la situación inmunológica, la alteración de los procesos endocrinos, los trastornos neurotóxicos y el cáncer.
- La radiación ultravioleta puede reprimir la respuesta inmunológica y constituye una de las principales fuentes de cáncer de piel.
- La investigación demuestra que la exposición a niveles de ruido elevados o persistentes cerca de las escuelas puede influir negativamente sobre el aprendizaje de los escolares.
Nuestra dependencia absoluta del medio ambiente, nos hace vulnerables a los grandes cambios ambientales, como el cambio climático, proceso con importantes consecuencias sobre la salud humana y el medioambiente, y que se expone en otro apartado, pueden ser origen de severas alteraciones en los ecosistemas y en la salud de las personas y animales.
LA IMPORTANCIA DE LA ACCIÓN COLECTIVA
Reconocer la estrecha relación entre la salud humana y el medioambiente es el primer paso para abordar los determinantes ambientales y requiere un esfuerzo conjunto de individuos, comunidades, gobiernos y organizaciones. Desde la vigilancia y el control de la contaminación hasta la promoción de prácticas agrícolas sostenibles y la mitigación del cambio climático, todos tenemos un papel que desempeñar en la protección de nuestra salud y nuestro medioambiente.
Establecer un vínculo causal entre los factores ambientales y los efectos perjudiciales para la salud humana y el medioambiente es crucial para abordar la problemática. La variabilidad de la carga ambiental, las diferentes vías de exposición y la complejidad de los factores contribuyentes dificultan la comprensión de estas complejas relaciones. Sin embargo, con una investigación continua y una acción concertada, podemos avanzar hacia una comprensión más profunda de estos problemas.
La importancia de la acción colectiva es obvia para proteger nuestra salud, protegiendo nuestro entorno. Al abordar los determinantes ambientales de la salud humana y el medioambiente y trabajar juntos/as para mitigar los riesgos ambientales, podemos forjar un futuro más saludable y sostenible para todos y todas.