“Voy a empezar de cero” es una frase que seguramente has escuchado decir a alguien cercano, o que te has dicho a ti mismo/a alguna vez. Muchas personas creen que empezar de cero es hacer un reset y olvidar la información y todo lo vivido. Obviamente, eso es imposible y, aunque parezca mentira, nuestras vivencias pueden ser una fortaleza. Llevamos con nosotros/as experiencias y aprendizajes y, si tomamos conciencia, éstas pueden ser de gran ayuda para el futuro.
Empezar de cero, es transitar hacia un cambio, una nueva etapa. No solamente es el deseo de dejarlo todo atrás, puede ubicarse dentro de un sinfín de contextos: empezar de nuevo en una nueva ciudad, poner en marcha un plan de vida, adoptar unos hábitos saludables, superar una pérdida o un cambio personal o laboral. Sea cual sea el motivo, encauzar esa nueva etapa puede resultar más sencillo si tienes en cuenta ciertos aspectos.
8 CONSEJOS PARA EMPEZAR DE CERO
Di adiós a la etapa anterior
Empezar de cero es dejar atrás una fase anterior y es necesario despedirse de ésta de forma consciente, aceptando y recogiendo aquello que hemos aprendido y que nos sea útil. Cerrar etapas conscientemente es una manera de evitar que algo pueda perjudicarnos en el nuevo camino que iniciamos. En algunas situaciones, pasar a una nueva etapa implica superar un proceso de duelo. En estos casos, se recomienda tomarse el tiempo que se necesite para asimilar e integrar la pérdida de manera equilibrada.
Establecer objetivo y prioridades
Tener un propósito ayuda a orientarnos hacia una dirección que nos llena y que nos mantiene en motivación. Aunque pueda resultar difícil al principio, uno de los pasos más importantes y que marcarán la diferencia a la hora de emprender una nueva etapa o hacer un cambio importante, es encontrar el motivo o los motivos por el que se quiere hacer. Para encontrar el propósito, primero hay que ordenar las prioridades hasta encontrar qué es lo más importante para nosotros/as y que nos haga tomar las primeras decisiones para ponernos en movimiento.
Abrir la mente
Empezar de cero es sinónimo de buscar nuevas oportunidades, abrirse nuevas puertas en el camino. Si se pretende comenzar una nueva etapa y no se es consciente que se deberá salir de la zona de confort, que aparecerán nuevas experiencias y situaciones a las que tenemos que enfrentarnos y atrevernos a vivir, no se estará haciendo realmente un inicio nuevo. Se estará pretendiendo hacer lo mismo que ya conocíamos. Iniciar las acciones necesarias para llegar a nuestro propósito, aunque sean distintas a las que hemos hecho hasta ahora, es vital para prosperar en esta nueva andadura. Abrir la mente con el fin de adaptarse a nuevas oportunidades, es vivir nuevas experiencias que pueden ser muy positivas y gratificantes.
Anhelos y necesidades
Otro punto importante para empezar de cero es hacer un ejercicio de autoconocimiento, realizar un análisis profundo de nuestras necesidades y de todo aquello que anhelamos en nuestra vida. Una vez tengas una lista creada, diferencia entre aquellos deseos alcanzables de los que no dependen de nosotros/as e identifica si lo podemos conseguir a corto, medio o largo plazo. Es importante establecer esta diferenciación porque si sabemos cuánto vamos a tardar en conseguirlo, si tomamos consciencia, haremos que el interés perdure en el tiempo y no nos frustremos si no lo conseguimos de inmediato.
Ten un plan realista
Una vez tengas la lista de necesidades y hayas hecho introspección, establece un plan que lo haga posible. ¿Qué tareas o qué acciones concretas necesitas llevar a cabo para poner en marcha el cumplimiento de esa lista de objetivos? Es muy útil anotarlo y detallar qué necesitas, qué obstáculos te puedes encontrar y a qué posibles soluciones podrías optar si eso ocurriese, para poder estar prevenido/a. Aunque el futuro es incierto, planificar te ayuda a mantenerte comprometido/a con tu fin y tener una visión amplia de todo lo que tú puedes hacer para conseguirlo.
Motivación
Empezar de cero requiere de mucho compromiso y valentía, pero la motivación también es un elemento clave en este proceso. Buscar fuentes de motivación y de fortalecimiento, ayudan a no decaer y a continuar avanzando en todos esos pasos que hemos planificado para lograr nuestros propósitos. En el momento de buscar la motivación, es importante llevar a cabo el autocuidado físico y emocional que necesites, que cuentes con fuentes de apoyo en tu red más cercana y que te ayuden en los momentos de mayor dificultad, de crisis o de caídas emocionales.
Resiliencia
Cuando comienzas un nuevo camino es habitual que haya obstáculos que se interpongan en el camino. Pueden ser tanto externos, como conflictos, dificultades económicas o administrativas, como internos, por ejemplo, el miedo, la falta de confianza o de motivación. Por esta razón, entrenar la resiliencia es una forma de enfrentarse con éxito a las adversidades. Tener en cuenta todos los factores o situaciones que pueden obstaculizar tu plan de empezar de cero es, en cierto modo, una manera de estar prevenido/a y poder tener en mente estrategias positivas para combatir los posibles golpes.
Comenzar
Por último, cuando hayamos pasado por las fases anteriores, tendremos las suficientes estrategias y herramientas para empezar e intentar mantenerlas en marcha en el día a día, con el fin de poder vivir esa nueva vida que necesitamos o deseamos. Es importante que tu propósito se mantenga sostenido en el tiempo. Es fundamental, permitirse el tiempo necesario para asimilar las nuevas sensaciones que puedan surgir en las primeras semanas y para cumplir con todos los elementos de las fases anteriores. Si se tienen en cuenta todos los puntos que hemos tratado en este artículo, contarás con los recursos suficientes para empezar de cero y poner en marcha un nuevo plan de vida.