¿ÁRBOL DE NAVIDAD ARTIFICIAL O NATURAL?

¿Árbol de navidad artificial o natural?

 

A medida que nos aproximamos a las festividades navideñas, surge la duda sobre la elección del árbol de Navidad adecuado. ¿Es más conveniente un árbol artificial y reutilizarlo los próximos años, o un árbol natural, más tradicional y con la posibilidad de reciclarlo al final de la temporada? ¿Qué es mejor para el medio ambiente y, por consiguiente, para ti?  

La tradición del árbol de Navidad ha experimentado transformaciones a lo largo del tiempo, pero su presencia en los hogares durante las festividades sigue siendo parte de la iconografía de la navidad. Un clásico. Veamos a continuación qué aspectos ambientales y de sostenibilidad tener en cuenta en el momento de tomar la decisión de comprar un tipo de árbol u otro.

LAS RAÍCES DEL ÁRBOL DE NAVIDAD

La tradición de adornar un árbol durante la Navidad, originaria de las culturas nórdicas, ha trascendido fronteras, convirtiéndose en un símbolo universal de estas fiestas. Aunque su origen se encuentra en países con climas y contextos distintos, la práctica se ha adaptado y adoptado en todo el mundo, independientemente de las variaciones geográficas.

Los países nórdicos, cuna de la tradición del árbol de Navidad, han influido en la forma en que otras culturas celebran estas festividades. En lugares donde las temperaturas son elevadas durante la Navidad, la adaptación de la tradición ha llevado a la introducción de árboles de otras especies locales. Aunque elegir árboles mediterráneos puede parecer una alternativa, estos también pueden sufrir al estar en interiores con calefacción elevada y terminar en la basura.

ÁRBOLES DE NAVIDAD NATURALES

Miguel Ángel Soto, responsable de la campaña de bosques de Greenpeace España, destaca que la clave reside en la reutilización y el uso consciente de lo que ya se posee. Si ya tienes un árbol artificial de años anteriores, la opción más sostenible es reutilizarlo. Del mismo modo, si cuentas con un abeto u otro tipo de árbol en casa, o incluso una planta de interior decorativa, utilizar lo que ya tienes es la mejor práctica.

La problemática de los abetos naturales radica en su difícil supervivencia después de la temporada navideña. Ecologistas en Acción informa que más de dos millones de árboles de Navidad en España terminan en la basura o se trituran para convertirse en abono. Es muy difícil que estos árboles se puedan adaptar a los hogares, las temperaturas de algunas regiones y sobrevivir. Por eso, terminan muriendo y se decide desecharlos antes de que esto ocurra.

Si la elección es un árbol natural, la Federació d’agricultors Viveristes de Catalunya (FVC) recomienda asegurarse de que ha sido cultivado en un vivero, siguiendo normativas de respeto al medio ambiente y evitando la deforestación. Estas acciones intentan animar a elegir árboles naturales de manera que cuidemos de la naturaleza y seamos responsables con el medio ambiente. El objetivo es preservar los lugares donde crecen los árboles y ser amigables con el entorno mientras celebramos la Navidad.

Miguel Ángel Soto sugiere un enfoque de consumo responsable para cuidar del planeta durante fiestas. Utilizar plantas de interior existentes, como cactus o suculentas, para crear adornos festivos es una opción ecológica y sostenible. Además, la creatividad puede ser clave: desde adornar libros hasta construir árboles de Navidad de papiroflexia, hay múltiples maneras de celebrar de manera sostenible.

ÁRBOLES DE NAVIDAD ARTIFICIALES

En un artículo del National Geographic, podemos obtener más información acerca de esta dicotomía de los árboles de Navidad, enfocándose en los árboles artificiales. Aunque estos pueden parecer más convenientes, su coste medioambiental supera sus beneficios.

En Estados Unidos, el 81% de los hogares opta por árboles artificiales, fabricados mayormente con policloruro de vinilo (PVC), derivado del petróleo y potencialmente contaminado con plomo y otras sustancias tóxicas.

El proceso de fabricación y transporte de árboles artificiales contribuye significativamente a las emisiones de gases de efecto invernadero. Además, su vida útil es limitada, ya que la mayoría termina en vertederos sin ser biodegradable.

Rick Dungey, portavoz de la National Christmas Tree Association de Estados Unidos, insiste en que los árboles naturales son la opción más sostenible según todos los grupos medioambientales y científicos. Aunque algunos árboles naturales pueden terminar en vertederos, cada vez más empresas y organizaciones están enfocadas en el cultivo, venta y reciclaje de árboles, evitando así la tala indiscriminada.

En última instancia, la elección entre un árbol artificial y uno natural depende de consideraciones personales y valores ambientales. Según la información proporcionada, la sostenibilidad se inclina hacia los árboles naturales cultivados responsablemente y gestionados de manera circular. Pero si tienes uno artificial en casa, es mejor usarlo todos los años que sea posible.

ÁRBOL DE NAVIDAD ARTIFICIAL Y NATURAL: PROS Y CONTRAS

Artificial Natural